El pasado 8 de abril visitamos el arroyo Pedroches con el fin de aprovechar al máximo la corta estación primaveral cordobesa. Este lugar es un rincón de increible belleza, en la puerta misma de la ciudad, donde uno puede olvidarse por completo del estrés del tráfico, el ruido de las ciudades y disfrutar con la naturaleza, más cercana de lo que podamos imaginar.
Un ejemplo, entre otros muchos, son las orquídeas que pudimos observar, presentes en grandes poblaciones, y siempre muy atractivas… tanto para los humanos como para los insectos. Os esperamos en la próxima visita…
Florent