Según lo establecido en el censo nacional, el 20 de diciembre nos fuimos a censar las Grullas del embalse de Sierra Boyera, al norte de la provincia de Córdoba.
Cuando estábamos acercándonos a las inmediaciones del embalse, nos vinimos un poco a bajo; después de una hora de coche, no veíamos ni una sola grulla. Seguimos avanzando hasta nuestro punto de observación, cerca del mirador que hay en la orilla, es entonces cuando empezamos a oír el trompeteo típico de estas aves. Sí, allí estaban, al fondo de la dehesa, cerca de la orilla; había un gran bando y entre las grullas otro enorme bando de ánsares. Contamos unas 400 grullas y unos 180 ánsares. Pero en un momento, salieron al vuelo para posarse unas decenas de metros más allá, junto al agua, esto nos permitió contar el enorme bando que se escondía entre la dehesa. La luz se perdió enseguida en el día anterior al más corto del año y pitamos en retirada.
En total 900 grullas, 180 ánsares y una hembra de gorrión chillón con problemas de vuelo, fue el balance de nuestro censo.
Adrián Bascón, Iván Nieto, Florent Prunier, Silvia Saldaña